Paragliders
En la actualidad existen muchas marcas en el mercado, que ofrecen una amplia gama de modelos en varios tamaños. Recientemente, se han introducido nuevos tipos de velas para atender los nichos especializados que han surgido dentro de nuestro deporte, como el speed flying, el speed riding y el hike and fly. La oferta es impresionante, y elegir la vela adecuada puede ser una tarea ardua. Esperamos que esta guía te sea de ayuda.
En primer lugar, tienes que decidir qué tipo de vuelo es el que más vas a practicar y a qué nivel estás volando ahora mismo. Debes ser cien por cien realista en cuanto a tus capacidades y experiencia. Si eres un piloto recreativo que vuela menos de cincuenta horas al año, entonces elige una vela con altos niveles de seguridad pasiva, como los que ofrecen las de las series Mojo o Buzz. Este tipo de velas tendrá la estabilidad y la facilidad de mando que te permitan volar con confianza y seguridad, incluso si has pasado cierto tiempo sin volar. No caigas en la trampa de descartar esta categoría como "de bajo nivel", pues son de los parapentes más ágiles que hay y tienen suficiente rendimiento para grandes vuelos de distancia y maniobras acrobáticas de las serias. Muchos pilotos veteranos dicen que están haciendo los mejores vuelos de su vida con este tipo de velas, después de haber tenido experiencias poco satisfactorias con velas más exigentes. Nunca es necesario volar una vela de una categoría superior si no vuelas con mucha regularidad, aunque lleves años volando.
Si tienes la suerte de volar casi todas las semanas del año y puedes estar al día, entonces puedes considerar una vela intermedia como las de la serie Rush. Si eres un piloto comprometido con varios años de experiencia, entonces podrías elegir una vela de la serie Delta. No deberías ni plantearte estas velas a menos que hayas hecho algún SIV y sepas cómo manejar condiciones turbulentas. Volar una vela que esté por encima de tu nivel es perjudicial para tu disfrute y tu progresión. La realidad es que la mayoría de los pilotos experimentados se divertirían más y sacarían más partido en general a sus vuelos volando con una vela un espolón por debajo del que elegirían normalmente.
Únicamente si tienes mucha confianza, estás muy entrenado y tienes mucha experiencia, deberías considerar volar con una vela de categoría superior a la intermedia. Recuerda que lo que vas a adquirir es una máquina voladora que va a comprar y que ¡tu seguridad depende de esta decisión!
A menudo se pasa por alto la confianza, pero es el factor más importante en la elección de un parapente. Si te sientes bien con una vela, volarás mejor que con otra que te produzca ansiedad. Si pierdes confianza y te asustas en una situación mala o en un aire movido, también pierdes la capacidad de tomar decisiones bien calculadas porque la adrenalina y el miedo te nublarán el juicio justo cuando necesitas que éste sea más claro. Por otro lado, si realmente disfrutas con tu vela y te sientes cómodo bajo ella, tu umbral de incomodidad será mucho más alto y, por tanto, tendrás más posibilidades de tomar las decisiones correctas en todo momento.
A la hora de elegir una vela, ignora el estilo o la moda, y no te fijes en lo que vuelen tus amigos. El hecho de que hayan subido de categoría no significa que sea la opción correcta para ellos o para ti. No te dejes influir por las cifras de velocidad máxima y de planeo, pues eso puede ser una receta para el desastre. No caigas presa de los informes de las pruebas de homologación como hacen algunos locos que suman los resultados de las pruebas EN y compran la vela que piensan que tiene el mejor resultado. Esta es una forma muy engañosa de elegir una vela, y en la mayoría de los casos ni merece la pena fijarse en los resultados de las pruebas. En lugar de ello, elige una vela basándote en el boca a boca y en las recomendaciones del fabricante, pues son mucho más relevantes que cualquier ficha de homologación.
Haz una evaluación honesta de tus capacidades y elige una vela que te dé la mayor confianza posible en el aire.
Una vez que hayas reducido las candidatas a tres o cuatro modelos, haz un vuelo de prueba con ellas, preferiblemente en el mismo sitio y el mismo día. Esto te dará la mejor información y te permitirá hacer una comparación realista. No escuches la propaganda comercial ni pienses en la gran oferta que te hará el vendedor. Piensa en cómo te has sentido con cada vela: ¿despega bien? ¿La notaste nerviosa o suave y cómoda? ¿Te sentiste seguro y cómodo con ella en todo momento?
La que tenga más síes será probablemente el que te convenga. No importa que tus amigos compren una vela diferente a un precio más barato porque al final vas a ser tú quien volará el parapente, no ellos. Si lo piensas bien, estás gastando mucho dinero. Si el parapente con el que te sientes más a gusto cuesta es un par de cientos de euros más, serías tonto si no lo compraras sólo por el precio.
Para calcular el peso, puedes obtener una estimación tomando tu peso desnudo y añadiendo 20 kg. Esto te dará su peso aproximado "en vuelo". Sabiendo esto, puedes seleccionar la talla de esa vela que te acerque más al rango de peso ideal. Si te encuentras en la frontera entre dos tallas, entonces analiza qué tipo de vuelo practicas y elige en consecuencia. Por ejemplo, si esperas volar a menudo con vientos bastante fuertes, entonces un poco más de carga alar podría ser algo bueno para darte más velocidad, así que la talla más pequeña sería mejor. Por otro lado, si eres un piloto con pocas horas y sueles volar en condiciones más flojas, la talla más grande podría ser una mejor elección, ya que te dará una tasa de caída ligeramente mejor, lo que te ayudará a subir bien y te permitirá aterrizar más fácilmente.
Sin embargo, si vuelas a menudo en condiciones térmicas fuertes, puede que te sientas más cómodo con la talla más pequeña. No te preocupes demasiado por esto: irás seguro en cualquiera de las dos tallas, así que simplemente compra la que mejores sensaciones te dé. En general, recomendamos a la mayoría de los pilotos que elijan una talla que les sitúe en la mitad superior del rango de pesos, ya que es ahí donde las velas de Ozone rinden mejor. Cada piloto desea algo un poco diferente; recuerda que la moda o el capricho no son importantes. Tu comodidad y confianza en el aire es lo único que importa.
Al final del día no importa quién subió más alto o quién voló más lejos. Lo que importa es que vuelvas a casa tras haber disfrutado de un gran vuelo, con una enorme sonrisa en el rostro, la cabeza llena de hermosas vistas y unas sensaciones fantásticas, porque de eso es lo que tratan nuestros vuelos.