Parapentes


Las velas modernas no son inmunes a la lluvia y la humedad. Volar con una vela mojada puede provocar que deje de volar normalmente .
Debido al diseño eficaz y sin arrugas de la vela, el agua tiende a acumularse en el borde de ataque, lo que provoca que se desprenda la circulación del aire sobre la misma. Ese desprendimiento hará que la vela sea más propensa a entrar en parachutaje, por lo que debe evitarse a toda costa volar bajo la lluvia o con una vela mojada (por ejemplo, si está húmeda por el rocío de primera hora).
Si te sorprende accidentalmente un chaparrón, lo mejor es aterrizar inmediatamente. Si tu vela se moja envuelo, se aconseja mantener el vuelo acelerado utilizando el pedal del acelerador y/o soltando los trimmers, incluso durante la aproximación final. NO hagas orejas como técnica de descenso, pues las orejas aumentan la resistencia, y con una vela mojada esto aumentará aún más las posibilidades de que se quede en parachutaje. En su lugar, pierde altura con suaves giros de 360º y mantén la velocidad-aire en todo momento. Si tu vela entra en parachutaje cuando está mojada, suelta inmediatamente los trimmers y acelera para recuperar velocidad-aire.